El envejecimiento de los párpados es un proceso progresivo de deterioro de los tejidos que cambia la forma y la expresión de la mirada.
En el párpado superior se produce un aumento excesivo de piel formándose un
pliegue que en algunos casos llega hasta el nacimiento de las pestañas y se
extiende por la parte lateral del párpado contribuyendo a la formación de las
patas de gallo. En el párpado inferior se acumula también un exceso de piel y
típicamente aparecen las bolsas de grasa y ojeras. Estos cambios de los
párpados producen en la persona un aspecto de cansancio, enfermedad, tristeza y
enfermedad, que no corresponde con los sentimientos reales.
Consiste en extirpra la piel excedente del párpado superior y las bolsas grasas
superiores. Posteriormente se extirpan las bolsas de grasa por vía
transconjuntival, es decir por dentro del parpado. Ello evita seccionar el
músculo orbicular que sujeta el párpado en su posición. A continuación se
realiza la cantopexia, que consiste en tensar el párpado inferior para realzar
y rejuvenecer la mirada, y sobretodo evitar el aspecto de ojo operado.
Finalmente se extirpa el exceso de piel del párpado inferior.
El postoperatorio de la blefaroplastia no es doloroso. La mayoría de los
pacientes describen una molestia de tipo tirantez en los laterales de los
párpados. Estas son siempre unas molestias fácilmente controlables con los
analgésicos habituales. En las primeras horas se aplica un colirio y una pomada
que impide ver con nitidez, pero no se vendan los ojos ni se impide que el
paciente pueda mirar y reconocer su entorno. Es conveniente que siga las
recomendaciones en cuanto a la posición de la cabeza en la cama, así como otras
instrucciones que le entregaremos, encaminadas a disminuir la inflamación y a
que esta se resuelva cuanto antes.
Además prescribimos la realización de, al menos, dos sesiones de drenaje
linfático a la semana durante las cuatro semanas posteriores a la
blefaroplastia. Es muy importante no exponerse a la radiación UV (sol, rayos
UVA…) durante unas 3 semanas, hasta que no hayan desaparecido la inflamación.
Durante los primeros 6 meses posteriores a la cirugía es conveniente proteger
las cicatrices con cremas de factor de protección solar.
La intervención se realiza habitualmente con anestesia local y sedación, de
forma ambulatoria. La intervención dura aproximadamente una hora, y el tiempo
de permanencia en la clínica suele ser de una hora más. En cualquier caso no se
da de alta a un paciente hasta evidenciarse una recuperación completa.